NRCNEXT 07-10-08 Por PAUL ISKE y BAS RUYSSENAARS
Muchas personas eligen un comportamiento de aversión al riesgo porque estiman que la probabilidad de consecuencias negativas del fracaso es mayor que la recompensa por el éxito.. El miedo a perder el trabajo, arriesgarse a la bancarrota o enfrentarse a lo desconocido es, por lo tanto, mayor que el reconocimiento, estatus y autorrealización que le llegan con el éxito de una iniciativa. Nuestro “cultura de pago” en cuanto a los fracasos, esto refuerza esa reticencia a jugarse el cuello. ¿Y por qué deberíamos? la estamos pasando bien? Sin embargo, la importancia de experimentar y arriesgarse, quizás especialmente en estos tiempos económicos turbulentos, no debe ser subestimado. De lo contrario, la mediocridad triunfa.! Colocar, desea encontrar una ruta comercial más rápida hacia el Lejano Oriente. Usted organiza la financiación, barcos bien equipados, un equipo experimentado y te arriesgas. Navegas hacia el oeste desde la costa portuguesa. Para su sorpresa, no se encuentra con el continente previsto, sino con un continente desconocido..
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